Las inmobiliarias vuelven a vivir un gran momento después de pasar épocas complicadas en la crisis económica más fuerte de las últimas décadas de nuestro país. Afortunadamente esos malos tiempos han pasado. Cuando se quiere buscar una buena agencia inmobiliaria, hay que fijarse en las que tienen una dilatada experiencia como Segohouse o Fresno Inmobiliaria.
Conscientes de la importancia de elegir una buena inmobiliaria os vamos a dar unos útiles consejos a la hora de elegir una dejando a un lado nuestras recomendaciones anteriores.
¿Cómo elegimos una buena inmobiliaria?
- Informarse bien: hay que recabar información sobre las inmobiliarias que barajes para vender tu vivienda. Temas como la experiencia que tienen o su trayectoria en el mercado. No está nada mal el preguntar a vecinos, conocidos o amigos en donde compraron o vendieron su piso. A este respecto conviene elegir la inmobiliaria más adecuada para vender nuestro piso, por lo que tiene importancia el contar con tres o cuatro inmobiliarias para elegir y tomar la decisión de elegir al final la que más nos guste o más confianza nos dé.
- ¿Franquicia o no?: debemos saber si la inmobiliaria forma parte de una gran franquicia o si es una inmobiliaria de las denominada de barrio. Este último tipo no debe ser malo, pues existe grandes profesionales en estas pequeñas empresas. Si que es cierto que el que una inmobiliaria pertenezca a una franquicia, nos puede dar en algunos casos el acceso a una mayor presencia o cartera de pisos o clientes. Lo realmente importante es que cuente con grandes profesionales que te generen confianza.
- Cuidado con lo que te prometen: debes tener precaución con algunas inmobiliarias que valoran tu vivienda por encima del precio de mercado. No a las falsas promesas. Busca propuestas más reales. Del precio que te digan en un primer momento al que al final acaben vendiendo tu vivienda, es posible que haya un mundo.
- Honorarios honestos y compradores buenos: los honorarios que va a cobrar el agente no son los responsables de decir que lo hará mejor o peor. No por cobrar más va a ser el mejor. Debemos penar que la promoción de la vivienda, el marketing cuesta dinero. La tarifa de la comisión que se lleva la inmobiliaria es tema suyo, pero por lo general suele estar entre un 3% y un 5% de la vivienda que se vende. Respecto a los clientes, lo mejor es fiarse de los que se comprometan a investigar la solvencia del cliente y saber de sus gustos y deseos. No hay que buscar un comprador cualquiera, debe ser el más adecuado en su globalidad.
- Precio y exclusividad: otro punto que merece nuestra atención son las exclusivas. Si se llega a un acuerdo con la inmobiliaria, vas a tener que firmar un documento que en el que verá el periodo de tiempo en el que vas a tener el compromiso con ella de no vender la casa por tu cuenta ni por otra agencia. Esto hace que tengas que pensarte bien si deseas que una agencia inmobiliaria que te haga estar obligado a firmar esto es la mejor opción para ti o buscas una sin exclusividad. Si el piso se coloca en varias agencias es posible que vaya en detrimento de la imagen o el valor de tu casa. Además de eso, es posible que también te ocasione más molestias en términos de más visitas de clientes.
Un útil consejo para terminar
Si tomas la decisión de ser libre y no firmar un acuerdo de exclusividad porque quieres vender rápido y pones tu piso en algunas agencias o portales de Internet, es vital que el precio que se publique sea siempre el mismo. Si se cambia en tu anuncio particular, deberás avisar a tu inmobiliaria o inmobiliarias. Contar con dos precios diferentes lo que hace es dar desconfianza al comprador respecto a la venta de la vivienda, algo que causa mala impresión.
Nuestra recomendación es recurrir una agencia de confianza, al final te beneficias del conocimiento y experiencia de los profesionales.