Administrar un edificio de cabo a rabo puede parecer complicado, y créeme que así lo piensa aquel que le toca durante un año completo ser presidente de la comunidad (exceptuando a Juan Cuesta, que estaba en su salsa). Sin embargo, existen profesiones que pueden ayudar enormemente a administrar toda una comunidad de propietarios, como lo es la profesión de administrador de fincas.
¿Quieres conocer un poco más acerca de esta profesión? Quédate y te lo contamos.
¿Qué funciones realiza un administrador de fincas y por qué es tan importante?
Puede que nos imaginemos que organizar todo lo relacionado con un edificio sea una completa locura; seguimiento de cuotas, cumplimiento de normativa, resolución de problemas asociados a la convivencia, reformas y mejoras del edificio, organización de juntas de vecinos, preparación de presupuestos y derramas, etc.
Este trabajo es comúnmente asociado al presidente de la comunidad, y al vicepresidente si lo hubiera. Sin embargo, en la mayoría de comunidades esto no es tal y como lo imaginamos. Para realizar la mayoría de labores relacionadas con la gestión operativa y externa del edificio, se suele contar con la ayuda de un administrador de fincas, o administrador a secas.
Una vez que conozcamos los servicios que dicho profesional realiza, créeme que no te parecerá nada caro destinar un poco de tu dinero de forma mensual para cubrir el pago por sus servicios:
- Realiza la gestión económica: Se encarga de la elaboración y control del presupuesto de la comunidad, así como de la recaudación de cuotas. Además, realiza los pagos necesarios y lleva la contabilidad de la comunidad.
- Se encarga del asesoramiento legal: Proporciona asesoramiento en cuestiones legales relacionadas con la propiedad horizontal, la normativa de la comunidad y la resolución de conflictos entre propietarios.
- Convoca y asiste a las juntas: No todos los administradores se dedican a ello, ya que suele ser tarea del presidente de la comunidad. Sin embargo, en algunos casos, el administrador es capaz de convoca las reuniones de la comunidad, además de asistir a las mismas y redactar las actas. De esta forma, dicho profesional facilita la toma de decisiones de los propietarios y se asegura de que se cumplan las normativas pertinentes.
- Gestiona todo lo relacionado con cualquier empresa o servicio externos: Contrata y supervisa los servicios necesarios para el mantenimiento del edificio, como limpieza, jardinería, o reparaciones, asegurándose de la calidad y eficiencia de los mismos.
- Se preocupa por la conservación y el mantenimiento del edificio: Coordina las tareas de mantenimiento y se preocupa por las mejoras del edificio, velando así por el buen estado del mismo.
- Atiende a los problemas que surjan: Responde a las consultas y reclamaciones de los propietarios, así como a las posibles incidencias que puedan surgir en la comunidad.
Como puedes comprobar, el papel del administrador de fincas es muy útil para ayudar a todos los propietarios y al presidente. Además, su presencia incita a una mejor organización y cumplimiento legal de todas y cada una de las personas que comparten un mismo espacio y un mismo edificio.
¿Un administrador de fincas es necesario en todas las comunidades?
No necesariamente, pero como ya has visto su papel mejora claramente cualquier aspecto relacionado a una comunidad de vecinos.
Si la comunidad así lo desea, deberán aprobar en una junta su contratación, la cual deberá organizar previamente el presidente de la comunidad. Esta decisión dependerá de diversos factores, como el tamaño de la comunidad, la complejidad de la gestión, la disponibilidad de tiempo de los propietarios y la complejidad de las cuestiones legales y administrativas.
En comunidades pequeñas con propietarios comprometidos y tiempo disponible para la gestión, podría ser posible que los mismos propietarios asuman algunas de las responsabilidades administrativas y relacionadas con el edificio, como por ejemplo el tema de la limpieza (en las comunidades pequeñas no es necesario contratar a un administrador que, a su vez, se preocupe por contratar un servicio de limpieza ya que los vecinos son los mismos que se ocupan de esta tarea). Sin embargo, a medida que la comunidad crece en tamaño o complejidad, la contratación de dicho profesional se puede volver más recomendable.
Y es que, como bien saben los profesionales de Adminfinca, un administrador profesional es la mejor opción si lo que buscamos es que aporte su experiencia en el edificio, llevando de esta manera la gestión administrativa y financiera, las cuestiones legales relacionadas y cualquier asunto que necesite ser resuelto de forma eficiente. Además, liberará a los propietarios de la carga de tareas administrativas y garantizará un enfoque imparcial y profesional en la toma de decisiones.