El uso de las redes sociales en adolescentes está asociado con trastornos alimentarios

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Detrás de los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) suelen esconderse otras patologías emocionales, como el sufrimiento de personas muy perfeccionistas que buscan una autorregulación a través de la comida.

“Solemos decir que detrás de los problemas de conducta alimentaria siempre hay que mirar bajo el plato. El problema no es la comida, sino lo que esconde: ansiedad, una mal manejo de emociones, obsesiones…”, explica el coordinador de la Unidad de la Conducta Alimentaria del Hospital Marqués de Valdecilla de Santander, Andrés Gómez del Barrio.

Los trastornos alimentarios afectan, sobre todo a personas con una elevada vulnerabilidad y que tardan en pedir ayuda. El diario El Confidencial informa que «alrededor de un 4,1% de la población adolescente sufre algún tipo de trastorno de conducta alimentaria (TCA) entre los 12 y los 21 años».

Varios estudios han descubierto que los perfeccionistas tienen más riesgo de padecer trastornos alimenticios. Otros factores que hacen aparecer estos trastornos alimenticios son: la baja autoestima, la inseguridad, la obesidad, un ambiente familiar desestructurado o haber vivido abusos.

Las redes sociales juegan un papel fundamental en estos trastornos. «Las redes sociales son un arma de doble filo, por una parte son un lugar donde hay mucha información saludable sobre salud mental que puede hacer que estas personas no se sientan solas y romper con el estigma, por otro lado pueden ser un lugar muy peligroso al dejarse influenciar por modas, tendencias o informaciones falsas», dice la doctora Marta Rodríguez de Lorenzo.

Los TCA surgen a cualquier edad, pero la mayoría de los casos se dan entre los 12 y los 18 años, aunque en la actualidad hay niños con ochos años que sufren anorexia.

Según datos de los últimos estudios las mujeres tienen más riesgo de sufrir este tipo de enfermedades con una proporción 9 a 1. Una nueva investigación publicada en JAMA avisa de que uno de cada cinco niños y adolescentes en el mundo sufre de desórdenes alimentarios.

Los investigadores después de analizar datos de más de 63.000 niños y adolescentes de 16 países, descubrieron que un 22% tiene una alta probabilidad de sufrir un TCA.

«Casi una cuarta parte de los participantes presentaban conductas alimentarias alteradas, por lo que estos resultados ponen de relieve un ámbito que durante mucho tiempo ha recibido poca atención y ha sido ignorado», dice Trevor Steward, investigador principal de la Facultad de Ciencias Psicológicas de la Universidad de Melbourne.

Este estudio también explica que las niñas tenían más probabilidades de sufrir un desorden alimentario, con un 30% frente al 17% de ellos. La investigación ha descubierto otro dato relevante y es que estas conductas son más frecuentes en personas con un índice de masa corporal alto.

Este estudio demuestra que actualmente hay personas en riesgo de sufrir estos trastornos y que estas conductas acarrean todo tipo de problemas de salud, como malnutrición y carencias alimentarias.

Los psicólogos aconsejan que para los TCA es muy importante las campañas de prevención y la promoción de una imagen corporal realista. Las personas que sufren estos trastornos deben acudir a terapia y en las sesiones aprenderán a gestionar las emociones de forma saludable.

Los profesionales de Clínica nea explican que el tratamiento suele centrarse en mejorar la salud del paciente, después se aborda los patrones cognitivos o emocionales que puedan estar desencadenando el trastorno.

El uso de redes sociales incrementa el riesgo de padecer TCA

El boom por el uso de filtros, los retoques en las redes sociales para reducir centímetros del cuerpo y la presión social sobre la imagen corporal, todos factores están provocando un incremento de TCA, sobre todo, entre los más jóvenes.

Una investigación de la Universidad de Vermont (EE.UU.) ha descubierto que TikTok ofrece a los jóvenes contenido inadecuado sobre nutrición, perpetuando un mal estilo de vida.

La plataforma predomina la idea de que el peso es la medida más importante de la salud de una persona. Incluso, los vídeos con más visitas son los que glorifican la pérdida de peso.

«Cada día, millones de adolescentes y adultos jóvenes reciben contenido en TikTok que pinta una imagen muy poco realista e inexacta de la alimentación, la nutrición y la salud. Quedarse atrapado en la pérdida de peso de TikTok puede ser un entorno realmente difícil, especialmente para los principales usuarios de la plataforma, que son los jóvenes», explica la investigadora principal Lizzy Pope, profesora asociada y directora del Programa Didáctico en Dietética de la UVM.

«Nos sorprendía continuamente lo frecuente que era el tema del peso en TikTok. El hecho de que miles de millones de personas estuvieran viendo contenido sobre el peso en internet dice mucho sobre el papel que juega la cultura de la dieta en nuestra sociedad», informa Marisa Minadeo, otra investigadora del estudio.

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